sábado, 22 de abril de 2017

Cerezo

Te recuerdo como protección,
como amparo,
como lluvia que calma el calor y renueva el aire.
Te recuerdo como confianza
antes de que yo misma la tuviera.

Te pienso tanto,
hija de la primavera.

Estás en cada libro de poesía que podrías haber escrito,
pero eran otros tiempos
y tú ya tenías bastante con soportarlo.
Te encuentro cada vez que me miro al espejo
y resuena en mi cabeza tu voz,
tu risa.
Tu abrigo.

Te pienso tanto,
olor a azahar.

Te recuerdo mientras miro un columpio
en el que jamás me enseñarás a montar.
Y sé que me recuerdas pequeña,
con la boca llena de chocolate,
frágil,
tuya.

Te recuerdo ahora
que ya no tengo edad;
ahora
que el mundo se va a la mierda.

Ahora que para acordarme de alguien
ni siquiera tengo que lamer un sello.

Te pienso tanto,
tanto,
tanto,
que ahora que sé que crecí
me falta tu abrazo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario