martes, 9 de abril de 2013

Das Schöne am Leben

Te pongo en situación: el deseo de que se pare el ascensor y te deje atrapada conmigo. El olor a café un sábado por la mañana. Quien puede despertar por un rayo de sol, que tímido entra por el filo de la ventana, y te hace levantar un día más. Un escalofrío por la sonrisa inocente de un niño pequeño al que acaban de dar un regalo. Incluso el comienzo de un nuevo año en compañía de los tuyos. Ese saludo que te hace sonreír cuando estás mal.
Reclamo escuchar hablar de lucha, de revolución, de dejar en pelotas a los que nos oprimen y maltratan y abrigar con sus billetes a los que fueron humillados. O simplemente cuestionar lo establecido. Gratifica enormemente ver una biblioteca a rebosar fuera de época de exámenes. Respirar al ver la calma después de la tempestad, el arco-iris. Aspirar a que me recuerden lo importante que soy para alguien, así, sin venir a cuento. Conseguir salvar el odio y llegar al amor. Incluir en la rutina de los que me rodean luchar, día a día, por lo justo. Ayudar a resucitar cada mañana de la muerte que fue el día anterior. Sacar lo positivo en todo o casi todo, o al menos intentarlo.
Ahora, que has terminado de leer, tú, sí, tú, lee por separado la letra con la que comienza cada frase, por favor. Gracias por seguir ahí.

2 comentarios:

  1. Algún día quiero escribir transmitiendo lo que tu trasmites escribiendo

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